No deja de ser sorprendente la noticia publicada en "Diario de Avisos" (20 de diciembre de 2009). Senderistas que "por casualidad" hacen hallazgos de vasijas y demás restos de la cultura material awara, incluido grabados rupestres que son donados al Museo Benahoarita.
¿No será más bien expolio, producto de excavaciones ilegales, y robo de grabados rupestres, algunos recientemente desaparecidos como hemos podido comprobar sobre el terreno?
Leemos detalles que nos deja perplejos, como si fuéramos idiotas:
"El sencillo acto de buscar reposo para la mochila, excavando con la mano, llevó a uno de estos hombres al descubrimiento de nuevas cerámicas y otros restos arqueológicos que ya han sido entregados al Servicio de Patrimonio Histórico del Cabildo.
Algunos de estos excursionistas han repetido la experiencia en varias ocasiones y son numerosos los elementos encontrados que han entregado al área de Patrimonio de la institución insular".
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